Miren: ¡yo!

Mi foto
Escritora frustrada, espía no profesional, posiblemente acosadora de nacimiento y completa adicta a aparatejos electrónicos.

22.2.10

Febrero loco; marzo otro poco

Si cito a mi estimado delegado de Serbia: "Outrageous!". Como podrán ustedes observar, me he metido en un interesante juego, tal vez hasta más intrigante que el Adigma (si no han jugado sus rallies en internet, los recomiendo ampliamente). En fin, creo que esto sólo sirve para ponerle más sabor al extraño mes que he vivido.

Empezamos febrero con... Creo que ya ni sé cómo empecé febrero. Ah, claro, ¡ya me acordé! Empecé febrero con una ida de como diez horas a las distintas bibliotecas que hay en CU (con mínimos resultados) y una ida al Ajusco, no sin antes tener un ensayo con la Sinfónica y obtener la foto que me consagró como mujer mamonamente feliz.
Lo primero, la ida a CU, fue una expedición que seis buenas amigas decidieron hacer con verdaderos fines académicos. Encontramos un promedio de diez libros después de haber recorrido CU desde Rectoría hasta CCU. DIEZ MALDITOS Y TRISTES LIBROS DESPUÉS DE HABER IDO A CINCO BIBLIOTECAS. Sin comentarios. Por lo menos aprendimos a ir en el Pumabús y supe cómo no llegar a Ciencias. Ah, claro, cabe mencionar que por fin conocí al amor de mi vida y futuro hogar en un par de años: hablo de mi hermosa Facultad de Psicología a la que desde estos instantes amo mucho.
Lo de mi ida al Ajusco no fue una ida tal cual y no fue al Ajusco como tal. Fuimos mi familia y yo a una reunión con otra familia cuya residencia anda por esos rumbos. Ese día, pero unas doce horas antes, yo descubrí que teníamos, para ensayar, una nueva pieza: "Bacanal" de Sansón y Delila. Las sorpresas fueron varias: la primera, estaba en clave de sol. ¡Clave de sol para una violista que a duras penas y puede con la clave de do! Ja, insensibles, ¿qué les pasa? En fin, la segunda fue saber quién me dirigía... ¡Qué clave de sol ni qué nada! ¡Si ese hombre está a la batuta, yo puedo tocarle la clave de su preferencia, aunque ello me cueste el alma (o unos lentes con buen aumento)!

Le siguió una semana de suspenso con el TAEMUN y la pregunta en el aire: "¿Vendrá?".
¿Y qué creen?




¡Que no vino, señoras y señores! Dos años después de comenzar una tradición tan importante como el fuego olímpico (si no es que las olimpiadas mismas) el estimado delegado decidió no venir, rompiendo más de un corazón y arrebatándole la esperanza a más de una persona.
(Si llega usted a leer un día estas líneas, le quiero informar algo: aunque no fui la única que lo extrañó, tenga por seguro vuestra merced que nadie nunca lo podrá extrañar con tanta fuerza como yo. Vous me manquez beaucoup.)
TAEMUN, TAEMUN, TAEMUN. ¡TAEMUN! Se me había olvidado que hace un año y algunos días le hice una entrada a un proyecto que ya no puede salir de mi alma. Este año aprendí algo tan valioso que no podré dejar de agradecerlo: en la vida hay que hacerle frente a los problemas con un poco de dignidad.
También aprendí que no es bueno bajar las escaleras con los tacones mal puestos.

Auméntenle a febrero esta semana que acaba de pasar, con un jueves-viernes salvaje de diez horas llenas de intenso trabajo. Conocí de Guanajuato y Querétaro lo que en casi dos décadas no supe. Gracias, estimado profesor Noh, por haberme hecho dormir tres horas y por informarme que los taxis son más caros aquí que en la Ciudad de Querétaro. Espero que el esfuerzo valga la pena.

Si así estuvieron los últimos 21 días, no quiero saber qué pasará durante los próximos siete. ¿Realmente quiero que llegue un marzo sin Dream Theater en mis planes presupuestarios? Mejor que llegue abril. Ya quiero ver a mi Sabinita querido.

14.1.10

Jesucristo superpoeta

¿Cuántos hombres han vivido y vivirán
sin nunca ser recordados;
desplazados sin algún legado,
enterrados en aquel desván
que siempre será utilizado?

Una acción que lleve a la inmortalidad,
a ser recordado con pasión y ruido;
ya s romper con lo pensado r lidad,
o tal vez una nueva verdad establecer,
son lo que se debe hacer para evitar el olvido.

Más intentos de poesía

Se desliza silenciosa
por la silla y por la mesa.
Corre, llega a mi cabeza
(ordinaria no es la cosa).

Llega y rompe las ventanas,
cual diamante contra cristal.
Llega en un sigilo mortal;
llega, quita telarañas.

Es el cielo del infierno,
¡una auditiva salvación!
Se convierte entre la canción
y notas el hostil, tierno.

¡Oh, tú, música maldita,
que nos tienes condenados
a escuchar, encadenados,
esa belleza infinita!

¡Oh, tú, música bendita,
acaricia nuestras almas!
Sólo tú, que todo calmas,
ven y de mí el dolor quita.

6.1.10

Utilidad de las redes sociales

-- Esperen, ¡¿están hablando de la misma persona?!
-- Sí.
-- Jaja, deberíamos crear un grupo en Facebook que se llame: "A mí también me gustó Julián".
-- Sería como si alguien creara el: "Yo también anduve con Carlos"... No, o sea, no lo han hecho, pero sería muy cómico.
-- Uno que se llame: "A mí también me gusta Álvaro"...
-- ¡¿Saben lo triste que es pensar que me uniría a todos esos grupos?!
-- Jaja, oye sí...
-- Eso sólo habla mal de mí y le hace propaganda a mi corazón de condominio D:

3.1.10

Más intentos de poetisa

En oscuridad
Brillante lucecilla
Es esperanza

Fotogenia

He estado viendo fotos todo el día. Me la he pasado así por horas y horas. Diferentes personas en diferentes lados; distintos mundos y situaciones nuevas. Horas y horas de fotos, tirada en la cama y sólo apretando un triste botón.

Entonces decidí parar de ver fotos por un minuto. Decidí no ver tus fotos por un rato y acabé en las de otras personas. Salió gente linda y salió gente fea; hubo lindos vestidos, alcohol, ropa interior, postes, cielo, mar, agua, más alcohol, hombre atractivo, "yo quiero ser como ella cuando sea más grande", dibujitos... Me harté de tanta imagen.

No sé cómo llegué, pero supe de la colegiatura del Colegio de la Ciudad de México y estuve leyendo propaganda del Colegio Alemán. Me dieron ganas de aprender ese idioma y me dio coraje que mis padres nunca hubieran contemplado mandarme a Xochimilco (aunque les costara un ojo de la cara pagar el curso intensivo de alemán).

Me puse a buscar música. Entre buscar y escuchar las mil recomendaciones, llegué a este punto: una hora irónicamente temprana.

Fue cuando vi la pestañita.

Había cerrado todas las pestañas, los álbumes; las malditas fotografías. Había visto gente linda en otras fotos (y vaya que vi y vi y vi y seguí viendo fotos), pero cuando abrí de nuevo la pestañita, ocurrió algo sin precedentes: la sensación de desarme total; un pleno y sincero: "Aquí me tienes, te espero". Una sonrisa, como cereza del pastel, y un par de ojos, que en su brillo muestran el más puro amor, adornaron mi cara.

2.1.10

Zona metropolitana, te amo

Tenemos ante nosotros a una pequeña adolescente cuya misión es nada más y nada menos que la terrorífica labor de expresar un poco de amor. Claro, a primera vista esto a cualquiera le es sencillo, pero para una mujer de complejos colosales, el formar parte del grupo Nosotros somos los románticos del siglo XXI se vuelve una ardua labor que vuelve a las láminas de dibujo una actividad tan mafufa como calentar agua en el horno de microondas.

¿Qué tan complicado puede ser decir: "Te amo y tu amor reclamo enérgicamente"? No mucho, especialmente porque acabo de hacerlo. Ah, claro, falta agregar cosas a la pregunta: ¿qué tan complicado puede ser llegar, pararse frente a alguien que altera hasta a mi pobre vesícula y decir, sin broma alguna y con sinceridad pura como agua de manantial: "Te amo y tu amor reclamo enérgicamente"? ¿Cómo alguien puede alterar a mi enformolada vesícula?

-Hola, vesícula.
-...
-¿Tú crees que también te afecta?
-...
-Sí, eso pensé.


A veces es impresionante lo profundo y reconfortante que llega a ser hablar con un órgano que lleva como tres años fuera de mí.

[Estoy huyendo de mis problemas. Mal, mal. Nina se sentiría orgullosa y a la vez decepcionada de mi comportamiento.]

No quiero inspiración, porque para inspiración ya tuve mucha a las cinco de la mañana de hoy y sólo acabé con un calambre en la pierna
----------------
Now playing: The Smiths - There is a light that never goes out
via FoxyTunes

¿Crisis literaria?

Nunca he sido buena para la poesía, creo que eso de hacer cosas en verso no es lo mío. Si me inspiro, siempre me salen las cosas es prosa, pero nunca he tenido la fortuna (¿o desgracia?) de poder plasmar algo de pasión en un soneto. Lo he intentado, de verdad lo he intentado, pero los resultados siempre son los mismos: no puedo salir ni siquiera del primer verso. Qué triste es no poder sentirme Shakespeare, que podía saltar de un género a otro con tanta gracia y de una manera tan encantadoramente sutil.

Nunca he sido buena para la poesía, tal vez decirlo ya me predispone: si una se cree víctima, acabará siéndolo. A veces leo un poema y digo: "Qué lindo"; sin embargo, no siento esa sacudida que provoca la prosa. Si algún día pudiera escribir algo de poesía, probablemente leería unos versos y me saldría algo más profundo que semejante frase.

Nunca he sido buena para la poesía, pero hoy quiero intentar hacer algo que lo cambie. Hoy he decidido que intentaré un poco a jugar con las palabras, a cambiar su estructura. Hoy quiero descubrir que el mundo entre metáforas se vuelve más hermoso.

Hoy decidí romper con la rutina
Hoy quise ver el sol con otros ojos
Ver los azules, los verdes, los rojos
Que viajan volando en luz matutina.

Nunca he sido buena para la poesía, será que tengo miedo a expresarme. Serrat me derrite con sus canciones y lo mismo provoca Silvio; Neruda me conquista, Sabines me impacta y Benedetti me hipnotiza. Ellos van más allá del "Qué lindo", dando paso al "Quisiera poder hacer la mitad de lo que ellos han hecho".

**

Decidí tomar un descanso antes de publicar algo más profundo y acabé leyendo cosas de mi hermana. Je, tal vez por su culpa se me acabe pronto la crisis y la fatiga y pueda escribir algo genial (Y acabar la tarea). w0ot!

26.11.09

Inserte canción de Cannibal Corpse aquí

Tres semanas. Me tomó tres semanas poder escribir de nuevo (en general). Como de costumbre, no estoy dispuesta a hacer una historia, a crear un mundo. No dudo que sea capaz de hacerlo, pero no creo que ése sea de verdad el propósito de usar esta cosa de vez en cuando.
Últimamente me he sentido cansada; cansada, frustrada, exorbitantemente desesperada y más dolida de lo que me gustaría. Les digo con sinceridad que, por más que quiera, no dedicaré a hacer un profundo análisis de por qué Don't Speak regresó a mi cerebro para machacar mi corazón como una bola de frío e insensible hielo (oh, ¿es acaso eso un momento irónico?).

Primera cosa en la agenda de actualización: la población escolar (o mínimo un 72%) cada vez es más decadente; por lo menos con la que tengo que compartir espacio por casi ocho horas diarias. Razones me sobran, y como es mi deber descargar mis corajes gratuitamente, os presento:

= [[ 3 EXCELENTES RAZONES POR LAS QUE ESTAMOS EN LA DECADENCIA ]] =

1. Su creencia de que el mundo nunca será más ancho y que sus caderas (con permiso del buen Sabina) y que todo aquello que invada su "espacio personal" sin consentimiento, y hago énfasis en la connotación que esta palabra tiene, no pasa del status de bicharrajo: ¡menudo título, poco explícito (ja), para la primera razón! Será que la considero terroríficamente importante.
Agarro, para estos fines, un sencillo caso que ilustra a la perfección de esta situación:
Tenemos aquí a un sujeto del sexo masculino, que de diecisiete años no pasa. ¿Situación socioeconómica? Tan próspera como para tener un BMW del año. ¿Atractivo? Sí, bastante, pero nada exagerado,; un sencillo: "Si el promedio es cinco, él debe ser un... Siete punto cinco a lo mucho". Pero cuando el espacio en que reside temporalmente carece, un poco y sin ánimos de ofender, de gente por encima del promedio, estaremos un poco de acuerdo en que es contemplado como un adonis; como un dios; como una versión masculina de Afrodita; como el hombre más guapo de la generación... Una belleza despampanante, pues. Y aunque no sea cierto, nosotros, inmersos en sorpresa y admiración infundida sin querer, alimentamos su ego e inflamos sus esperanzas de ser encantador.
Esto en algún punto se desborda y es ahí cuando ego más más ego llevan a una inundación llena de: ¡sexo, sexo, sexo, mucho sexo! ¡Orgías, perversiones a granel! ¡Sadismo, masoquismo, homosexuales al poder! Si esto se multiplica por un intelecto utilizado sólo en lo mínimo indispensable, nuestro producto es, parafraseando a un conocido cercano, un alma inmadura y un cuerpo violado por desenfrenada lujuria.

¡Y cuántos no son como él, con inclusive menor puntuación en la superficial escala de la apariencia física! Aunque suelo interesarme por saber qué ocurre en la cabeza de las personas, estos seres son de mi total desinterés y desagrado. Hay ciertas cosas en las que prefiero permanecer como una psicoignorante.

2. Reemplazo de cultura general por dramas televisivos mal elaborados: siendo yo una jovencita que convive con estos adorables especímenes, a veces me sorprendo de lo mucho que aprendo al estar rodeada de ellos. ¡Es que no mamen, Marcus está tan buenote que veo difícil que alguna mujer merezca su amor e interés! Aclaro que nunca, de verdad nunca, he visto siquiera una foto del tal Marcus [probablemente la busque después de publicar esto, La R.]; pero sé que puedo hacer ese comentario después de escuchar una cálida discusión acerca del último episodio de "Me quiero enamorar" por nueve malditos periodos, de cuarenta y cinco minutos cada uno, más otros dos, cortesía de Dibujo.
Claro, están enteradas estas mujercillas hasta del que le diseña la ropa interior a Marcus, pero nunca habían escuchado de Cervantes y pensaban que Slim era alguna especie de suplemento alimenticio. Es ese tipo de percepción el que las lleva a llamar poeta a Arjona y a menospreciar la genialidad de Serrat. Como decía Manolito: "Me cacho".

3. Sobrevaloración del físico y amor en exceso que deriva en una gran hipocresía: creo que es fácil deducir que 1 + 2 = 3 en su primera parte: antes muerta que llenita, puff. La segunda parte, me parece, ya la había tratado a fondo en un par de entradillas. Pero es que ya no es sólo el: "weey, nO maMeeS..! tee amO aSii iinTeenSiiSiimoO nnaa..!". ¡NO! Ahora es decir la misma porquería de frases en Facebook y usando demasiado un Nextel (porque, obvio, ¿quién es tan del proletariado como para no tener un Nextel o, en su defecto, una Blackberry?).

A veces me pregunto qué hubiera pasado si me hubiese establecido en esos grupos. Luego me acuerdo de Ailedd queriéndome llevar a la lujosísima Casona y pienso que mi vida siempre será mejor que la de todos ellos: me alegra ser una bastarda sin gloria, una intelectual renegada. ¡Oh, vaya que sí!

22.11.09

De compromisos adolescentes

Ahorita estaba matando un poco el tiempo, en parte porque necesito despejarme después de chutarme una hora viendo un documental que usaron en los juicios de Nuremberg y en parte porque todavía no estoy inspirada para Lengua ni para estudiar para mañana (eso ya lo haré al rato).
En fin, me acordé de nuestra idea al lujoso Tecnológico de Monterrey para nuestro primer (aw) MEXMUN. Sí, yo sé que algunos pensarán cosas como: "Tan bien que se ponía esto y nos va a llevar de paseo por el callejón de SUS recuerdos y conquistas existenciales medio frustradas, que involucran morder a su tío alcohólico, una boina y un mensaje emotivo al día siguiente", pero no es así, para felicidad de ustedes (y mía).
Bueno, les iba diciendo que estábamos en el Tec. El primer día bajamos del camión y entramos bastante felices, excepto yo, que me estaba ahogando entre nervios, desesperación y susto, e Iván, que tenía que sufrir junto con Ana mis momentos de paranoia. En fin, llegamos y todo parecía muy bien hasta que a la entradita nos encontramos con Márquez y el resto de los ex-pitufines (menos dos que tres que diez). Caminamos un poco más y nos llegó otra pitufoleada más emotiva que la anterior. Entre esas últimas personas iba una chavita que en otra época había sido mi mejor amiga, que tenía en la cara una sonrisa y cuyo artículo de moda era un sujeto al que agarraba con amor del brazo.
"¡Hola, te presento a mi NOVIO!"

Quiero recalcar que esa última palabra la dijo como si el simple hecho de pronunciarla la llevara a sentirse más orgullosa que nunca de sus logros como mujer.

Entiendo que la gente a mi edad esté feliz cuando tiene novio (o algo así, creo) y esas cosas; lo que no entiendo es cómo las personas pueden amar en dos segundos y creer que serán felices por siempre. ¿Tienen una idea de las décadas que nos quedan para tener, en teoría, una familia y casi acabar con nuestro estricto ciclo biológico? Todavía estoy de acuerdo con lo que pensaba [yo] hace algunos años: los adolescentes mutantes de ahora amamos demasiado pronto, con excesiva rapidez. ¿Eso es porque vemos mucha tele o porque comemos demasiado pollo con hormonas?