Miren: ¡yo!

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Escritora frustrada, espía no profesional, posiblemente acosadora de nacimiento y completa adicta a aparatejos electrónicos.

13.2.08

● Repercusiones.karmas.y.otros.artilugios.mitológicos ●

Por simple ocio y diversión [o lo que en teoría debería ser resumir el Speech para mañana, a menos que quiera reprobar - estrés, estrés -] decidí traerme la computadora a la escuela el día de hoy [o sea, el típico miércoles que me quedo hasta Dios-sabe-qué-hora]...

Bueno, para empezar con el mini relato fantástico del día, debo recalcar que gracias a mi poca escrupulosa idea de apañarme el internet de un completo desconocido, tengo internet [yuppee] y al parecer, esa idea de "computadora con internet disponible" atrae a cualquier ser humano que tiene muchísimo menos que hacer que yo [lo cual, sorpresiva y aparentemente no es difícil de encontrar en el patio a estas horas]. La cosa es que los primeros tres o cuatro depredadores se vinieron nada más yo estuviera sola en la mesa, con la típica pregunta de "Oh!! Tienes interneet?", claro, imagínense la escena, con cuatro hombres con voces graves que intentar hacer de todo un chiste [la clase de gente que normalmente me inspira a escribir un muy sincero "¬¬" en cualquier lugar].

La cosa es que yo sinceramente no quería prestarles mi bella compu pues porque no [¿mejor excusa?], les valió un queso y se la apañaron. Ah, pues va, apáñensela, pero no les va a servir. No sé si es porque mi computadora y yo compartimos un vínculo especial, piensa lo mismo que yo o sólo tiene un extraño detector de "mala vibra" [uuuu], pero la computadora se empezó a trabar como hacía mucho que no se trababa, el internet se acabó y lo que parecía ser la oportunidad de darse una buena checada a las páginas pornográficas se volvió un intento frutrado. Claro, por el ardid, salió la frase de "aaaash!! Qué chafa tu compu, amiga! Ya cómprate una nueva, no?" y yo claro ke pensé que con mucho gusto lo haría, pero ni tengo la lana que papi y mami les dan a ellos ni quiero otra computadora.

Al final del extraño ataque de ira de todos, me volví a apañar la compu [sería todavía más estúpido decir "me apañé mi propia computadora"] y mágicamente, se destrabó la compu, trabajó más rápido de lo normal y el internet regresó.

¿Será que el karma si existe y las máquinas captan cuando su dueño no quiere que les pase algo?

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